Durante los últimos meses se ha abierto en España y algunos otros países europeos un debate sobre las jubilaciones. La circunstancia de fondo para ello son los cambios demográficos que nos afectan y que están invirtiendo la pirámide de población.
Cuando se establecieron los actuales sistemas de protección social, a partir de los años 60 del siglo pasado; Europa estaba en su apogeo económico, aun teniendo sus crisis intermitentes, la población crecía y la esperanza de vida era menor, en consecuencia el coste de los jubilados también.
Solo a título de referencia la esperanza media de vida en España en los años 70 era de 72 años, en los 90 de 77 años y en 2010 de 80 años.
Volviendo al debate, las discusiones, parece que se centran, en alargar el período de cálculo y extender la fecha de jubilación. Por otra parte, en España, tenemos un problema endémico con el desempleo que se ha incrementado tras la última crisis financiera mundial, lo que agrava, más si cabe, la problemática relativa a las pensiones, no tanto actuales pero si futuras.
Finalmente nos encontramos que le dinámica de muchas empresas, lleva a adelantar la baja del sistema laboral a muchos empleados a partir de 55 años, con lo que se pierde una parte importante de los conocimientos y experiencias acumulados durante su vida profesional (cuántas empresas necesitan directivos que hayan tenido que capear profundas crisis como la que estamos sufriendo).
No hay una solución mágica y definitiva a todos estos problemas interconectados, pero, tal vez con un poco de imaginación podemos encontrar soluciones que minimicen estas problemáticas.
Estudiemos propuestas
Una de estas soluciones podría ser el trabajo a tiempo parcial; si tenemos Directivos y Técnicos especialistas, con más de 55 años, pero todavía con muchos años de productividad por delante,¿porqué no plantearnos su contratación a tiempo parcial? limitando su actividad donde puedan aportar valor añadido, traspasando sus conocimientos a jóvenes empleados menos experimentados y utilizar su experiencia en proponer soluciones a las diferentes dificultades y/o iniciativas que la empresa deba afrontar. El empleo a tiempo parcial ayudaría a mantener los costes controlados, permitiendo la incorporación de jóvenes con buena proyección profesional pero sin la experiencia suficiente y permitiendo al senior continuar estando activo y cotizando a la Seguridad Social. La base máxima de cotización en España se corresponde con un salario bruto anual de 38.760€, eso permitiría a un Directivo o Técnico especialista trabajar media jornada y mantener sus niveles de cotización con vistas a la jubilación, y mantenerse activo y productivo.
El resultado si esta práctica se fuera extendiendo sería: reducción del paro en los jóvenes, no incremento del paro en los senior, mantenimiento de las cotizaciones a la Seguridad Social y menos gasto en desempleo y prejubilaciones.
Si nos fijamos en el caso de Holanda, parece haber una relación directa entre su tasa desempleo (5,7%) y su tasa de contratación a tiempo parcial (47,7%); en España nuestros datos son: desempleo (19%) y contratación a tiempo parcial (12,6%). Como hemos adelantado, no pretendemos con esta idea solucionar todos los problemas, pero sin duda se podría contribuir si ayudara a reducir un 5%-7% el desempleo actual, manteniendo el empleo existente e incrementando las cotizaciones a la Seguridad Social.
Y como elemento adicional tendremos una sociedad más feliz; ¿es para pensárselo, no?
Descárguese este artículo, en formato pdf, con nuestra Newsletter de febrero de 2011: http://www.forolegal-abogados.com/newsletters/newsletter-febrero-2011.pdf
Esther Casademont es licenciada en Psicología Industrial. Fundó y dirige Hunivers, dedicada al área de recursos humanos, y Caucus, dedicada a la búsqueda de Consejeros externos. Más información en su página web: http://www.hunivers.com/
No hay comentarios:
Publicar un comentario